Tendemos a buscar información, cursos y experiencias que consigan aportarnos una diferenciación profesional pero pocas veces nos planteamos cómo estamos por dentro y cómo afecta esto a nuestra capacidad de ayudar a otros.

Al trabajar con personas, nosotros mismos influimos y afectamos a los servicios por nuestra forma de ser.

Hoy te presento alguno de los beneficios de indagar en quién eres tú y cómo bucear en el auto-conocimiento puede darte grandes resultados a ti mismo e impactar en la excelencia de tus servicios:

Saber quien eres para dirigirte a tus objetivos

Imagina que eres un iceberg flotando en el mar, ¿cuánto sabes de tí mismo más allá de lo que ves en la orilla?

Debajo de la superficie hay mucha información sobre cómo eres en realidad y bucear en las profundidades puede llevarte a descubrir grandes tesoros que al sacarlos a la luz te harán crecer. Sólo la experiencia de autocuestionarte te hace mucho más disponible a la hora de ayudar a otros.

En profesiones orientadas a la dimensión externa de la persona corremos el riesgo de caer en el aspecto superficial simplemente por el contenido del trabajo.

Si estás por aquí sé que este tema ya te lo has planteado y eres consciente de que la imagen personal es mucho más que el look.

La raíz de la imagen externa es la imagen interna (Auto-concepto) y no hay mejor manera de entrenarse que indagando en la tuya para ver cómo reaccionas ante tu mundo, tu realidad y por supuesto las otras realidades que te muestran tus clientes.

 

Trabajar los filtros, prejuicios y estereotipos sociales para ser más neutro en el trabajo

¿En qué crees? ¿Qué opinión tienes de las personas elegantes, naturales, creativas…?

Tanto tus opiniones positivas como las que no lo son tanto están influyendo a la hora de percibir a tus clientes.

Tu recorrido vital, educación, historia emocional…dejan un poso que construye una forma de interpretar también a los demás.

Tendemos a ensalzar las fortalezas y a disimular las áreas de mejora. ¿Eres consciente de ambas?

Ser neutro del todo es muy difícil pero si conoces bien cómo funcionas por dentro tendrás más habilidades para no proyectarte en tu cliente o dirigirle hacia objetivos que sean más tuyos, que de ellos.

 

Tener habilidades de inteligencia emocional y social que comprendan cómo funcionan los estereotipos

La imagen externa es percepción y emoción. Sabemos que determinados colores, formas, texturas y volúmenes causan un efecto en cómo te ve el entorno.

Lo que pasa es que para cada persona es diferente.

Me explico con un ejemplo:

Una persona con rasgos angulosos, cabello oscuro, movimientos rotundos e indumentaria estructurada tiene más papeletas para percibirse como dura, formal o incluso agresiva. Lo importante aquí no son los estereotipos visuales sino cómo el entorno lo percibe. Cada persona que le observe tendrá una respuesta distinta: quizá algunos lo rechacen, es posible que otros lo perciban como autoridad o quizá otros como alguien de confianza con el quien poder entablar una relación seria.

Alguien con facciones redondeadas, movimiento suave y vestuario en tonos medios con prendas de texturas nobles podrá ser percibida como más amable, accesible y cercana. Pero depende de quien la observe podría percibirse también como: ingenua, insegura y con poca valoración de sí misma, o tal vez como alguien jovial, desinteresado y espontáneo.

Todo depende del ojo con que se mire. ¿Cómo lo interpreta tu ojo? ¿Cómo percibes los estereotipos de la imagen personal?

La herramienta fundamental que te puede ayudar con todo esto son: Las emociones. Ya te he hablado de ellas en otros posts (Alegría, Tristeza, Miedo, Enfado, Asco, Sorpresa…) pero recuerda:

¿Para qué te pueden servir?

Cada cliente percibe su imagen y la de los demás desde su «mapa»: un conjunto de creencias, opiniones y valores que saltan al ruedo en dos momentos clave:

  • Cuando algo les atrae.
  • Cuando algo les causa rechazo.

En ambos casos aparecerán emociones y conociendo qué información viene a contar cada una de ellas podremos ayudar de forma más fácil al cliente a distinguir entre su Imagen Real y su Imagen Ideal.

La única manera de saber sobre emociones es investigándolas en ti mismo; ahondando en cómo funcionan en ti conseguirás tener las «gafas de la inteligencia emocional« para el trabajo y la relación con otros.

Para que sirve el Autoconocimiento

Ser consciente de cómo afecta tu propio estilo a tus servicios

Todos tenemos un Estilo que nos potencia y fundamentalmente uno que nos Limita.

¿Los conoces?

¿Sabes cómo afecta a la opinión que tienes de tus clientes?

Cuando te conoces en profundidad eres más consciente de tus errores, de tus límites y también de tus fortalezas.

Al hacer un trabajo de introspección contigo te darás cuenta de cómo reaccionas ante determinados estilos de vida.

Esto es fundamental porque no tratamos igual a las personas con las que nos identificamos tanto positivamente como negativamente.

Cuando falta ese trabajo personal es muy habitual que tu Estilo Limitante proyecte en el cliente cosas que no son suyas, sino espejo de nuestras cargas y temas sin resolver. Igualmente pasa que si no somos conscientes de nuestro Estilo Potenciador, también aparezca en sesión y te impida ver los obstáculos reales de tu cliente o hacer una discriminación positiva.

Ponerse al servicio de las personas más que a la búsqueda de resultados

Vivimos en una sociedad muy orientada a resultados y esto como profesionales nos estresa: conseguir más clientes, mejorar las técnicas, llegar a más personas….

Cuando tenemos el foco puesto únicamente en la búsqueda de unos resultados concretos aparece en nuestra vida la exigencia: llegar a más, ser más, conseguir más, uf…una presión que nos aleja verdaderamente de nuestra verdadera pasión por la que decidimos dedicarnos a otros.

El guardián de la exigencia es tu crítico interno, sí, esa voz que dice lo que «tienes que hacer», «debe hacerse…», etc.

El sustituto de la Exigencia es la Excelencia, que se nutre de tu guía interno, esa voz benévola y sabia que también tienes dentro de ti.

¿Y en qué se diferencia?

En un cambio de enfoque, en poner la atención en el objetivo más que en los resultados.

Y te preguntarás, ¿entonces cómo consigo resultados?

Si tu objetivo consiste en ayudar a las personas a sentirse mejor con su imagen y su estilo vida el marco es bien diferente.

Si te enfocas en exclusiva a que tu cliente de esta tarde «consiga avanzar con su imagen» tu atención está desviada a la expectativa de que alcance el cambio que tú estimas. Quizá no ocurra y tal vez sí.

Lo que pasa cuando te enfocas a que se «sienta mejor consigo mismo», tu objetivo más amplio y comprometido, no importará tanto si terminas a la hora, si has usado correctamente la técnica de color o si el plan va ajustado a la programación.

Piénsalo, es muy diferente exigirte que buscar ser excelente y curiosamente tus clientes lo notarán, destacarás y tú descubrirás nuevas formas de poner realmente al servicio de las personas.

~

Fíjate cómo con todas estas herramientas puedes hacerte un plan de auto-conocimiento estos meses para sentirte mejor contigo, ser más honesto en tus servicios y hacer brillar tu trabajo por tu compromiso con tu verdadera pasión.

Cuéntame: ¿te has pillado alguna vez proyectándote en tu cliente? ¿qué herramientas de auto-conocimiento usas o te gustaría poner en marcha para mejorar?

Deja tus comentarios más abajo, me encantará leerte.

Un abrazo

Domingo Delgado

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4 COMENTARIOS

Comentarios

  1. Evelyn dice

    Las herramientas que me resultan más cómodas son las de escuchar el tipo de pensamientos que la persona posee. Pues de acuerdo a sus pensamientos-creencias será como siente.
    Así, escucho frases hechas o refranes, que de mucho escucharlos, hoy, el cliente, los entiende como “verdades” , que no cuestiona. Y desde allí ocurre que se siente: atrapado, desvalorizado, sin oportunidades, triste, viejo, etc.
    He encontrado que a un tipo de creencias – pensamiento , se le asocia como complemento una emoción, y una forma de vestir que es limitante para ese ser.
    Por tanto, como es adentro es afuera.
    El reto estará en ayudarlo a desbloquear esta interferencia, tanto desde la forma de sentir como desde la forma de vestir.
    Para comenzar el cambio, me es válida cualquiera de ellas.

    Saludos!

  2. Ceciah dice

    Hola Domingo, me interesa mucho el curso de coaching de Imagen Personal virtual, y quería preguntarte si para estos tiempos de retos económicos has pensado en ofrecer el curso con una inversión más asequible?

    • Domingo Delgado dice

      Hola Ceciah, si estás apuntada a la newsletter semanal por allí te enterarás de todas las novedades y ofertas que lancemos. Será genial contar contigo en alguno de nuestros cursos! Un abrazo

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