Si a veces nos cuesta manejar nuestra propia imagen personal, ya cuando nos ponemos a emprender la cosa se complica.

Pasa no tanto al principio, cuando andas buscando tu hueco en el sector, montando una web y ofreciendo tus primeros servicios que se van modelando durante los 3 primeros años. Es después, cuando ya llevas un tiempo, llega un día en que te planteas si tu imagen profesional se corresponde con lo que ofreces, con la expectativa que tienen tus clientes de ti y sobre todo, si eres marca personal.

Con los clientes emprendedores nóveles que han pasado por mis servicios, me doy cuenta de los bellos esfuerzos que ponen con esmero por lanzarse a la piscina bien guapos y mimando cada detalle para todo esté perfecto en su presentación al mundo aunque dos años después su mensaje de marketing cambie por completo.

Con los seniors observo lo contrario: ya tienen un posicionamiento, trabajan video a tope y puede que las fotos de la web sean de cuando eran más jóvenes y su idea de negocio era francamente otra. Además, la máquina del día a día se ha hecho más compleja que no hay tiempo para andar mirando «qué me pongo», darle una vuelta a la estética audiovisual, o ponerse a renovar su imagen personal alineada con los valores de marca.

Todos quieren más visibilidad, unos para darse a conocer y otros para hacer crecer su negocio y ocupar un lugar preferente en la mente de su público objetivo.

Con menos recursos y visibilidad, más interés por la estética; con más capacidad de inversión menor apetito por mejorar su imagen global.

¿Por qué pasa esto?

Comparto hoy contigo los 3 grandes factores de la imagen del emprendedor y de otros mitos de la apariencia del emprendedor:

1. Creencias sobre la imagen personal:

  • Miedo a tener una imagen equivocada:

Tanto al comenzar como al llevar unos años en la profesión, en los servicios uno a uno, grupos, talleres, consultorías, visitas a empresa etc., surge una crítica interna de «mira a ver si no voy bien vestido» o «tengo que vestirme de tal manera que parezca profesional» o «así no me voy a presentar en este evento».

Con esta mentalidad, la imagen personal más auténtica de la persona pasa a un segundo plano y comienza a construirse un personaje visual que aparentemente funciona:

  • el look para las profesionales más racionales:  de los más elegantes
  • el look de las profesiones más emocionales: los más románticos y seductores
  • el anti-look de los outsiders que no se definen como sello de identidad: en realidad creativos o dramáticos.

La necesidad inconsciente de reconocimiento lleva a unos y a otros a construir una apariencia que depende totalmente del ojo que les mira y no de ellos mismos.

Y es que los retos profesionales, al sacarnos de la zona de confort, activan en nosotros mismos las inseguridades no trabajadas en el plano personal y para no mirarlas, mejor, reaccionamos y dibujamos un muñeco que proteja nuestra vulnerabilidad.

Este proceso es totalmente normal cuando nos faltan recursos para conectar lo que somos con nuestra vocación.

  • Cometer errores en la Comunicación no Verbal

Domingo, ¿qué hago con las manos cuando grabo un video o estoy en una conferencia? ¿algún consejo para no encorvarme demasiado?

Me encantaría poder ofrecer una técnica de calidad a corto plazo, pero no puedo, la verdad es que no puedo con toda la parafernalia que hay detrás de ciertos libros y cursos de Comunicación no verbal (CNV) orientados a aprender qué gestos, posturas o movimientos hacer para comunicarte de forma más efectiva, y te explico por qué:

Como te comenté en el post de Cómo abordar la Comunicación No Verbal evitando meter la pata la CNV es inconsciente y ocupa un 93% aprox. de todo lo que transmitimos. Sería genial poder manipularlo por arte de magia y tener el control de nuestra apariencia, pero éso no es posible del todo:

  • Nuestro sistema nervioso es económico y por eso, automatiza información. Ser consciente de todo, todo el rato todavía no es posible por mucho mindfullness que hagamos.
  • ¿Qué automatiza? Todo lo que está ocurriendo dentro de ti y en lo que no estás poniendo el foco (el discurso normalmente).
  • ¿Se puede mejorar? Sí, con el auto-conocimiento.
    • Lo que dice tu cuerpo sin palabras expresa: tus creencias y también tus emociones.
    • Si trabajas tu mentalidad, lleva un tiempo, después de transformar juicios y prejuicios, tu corporalidad sí cambiará.
    • Si ahondas en tu inteligencia emocional, tus sentimientos recurrentes dejarán de secuestrarte.
  • ¡Pero si me dicen que lo hago muy bien!: sí, una cosa es generar expectativas mediante determinada apariencia y otra cosa es lo que siente el cliente. Quizá se haga amigo/a de lo que presentas pero inconscientemente algo le dice que, contigo no.

Además, encima del cuerpo y su comunicación no verbal, ponemos ropa: otra variable más.

¿Qué pasa cuando hacemos un curso de oratoria?

Aprendemos gestos y posturas de forma consciente que provocan una presencia física que el público asociará a determinados códigos de comunicación y autoridad, pero éso, en el fondo, no significa que te estés comunicando de forma auténtica, en mi opinión, la mayor autoridad que puedes tener.

Oratoria + auto-conocimiento = sí.

  • «No me sé vestir, mejor que alguien me diga cómo hacerlo»:

Lo mejor que podemos hacer cuando no sabemos, no podemos o no tenemos tiempo de investigar algo por nuestra cuenta, es acudir a un profesional para que nos ayude/apoye.

La gran diferencia está en ser cuidadosos y evitar que otra persona elija la imagen o estilo de comunicación personal por nosotros corriendo el riesgo de quedarnos fuera de la conversación.

Es una pena ver perfiles en los que se luce más el estilista que el cliente y se nota mucho cuando han pasado varias personas, por las mismas manos.

Los estilismos prefabricados, muy producidos en peinado, indumentaria y posing dejan una impresión vacía de contenido emocional genuino. Si eres emprendedor, no necesariamente tienes que ser modelo…

Te dedicas a lo tuyo 🙂

  • «Una cosa es estar en casa y otra salir en un video, nada puede quedar al azar».

¡Cierto! Una estrategia de marca y negocio eficaz es el secreto para avanzar hacia las metas previstas y claro, lo de salir en pijama en los videos o las fotos de la web, quizá no encaje con el branding.

Y te parecerá una locura, tu estilo como emprendedor se parece más a cómo vistes en casa de lo que te puedas imaginar. Prueba con este sencillo ejercicio:

  1. Define el tipo de look que usar cuando estás en casa:
    • ¿Qué colores usas mayoritariamente?
    • ¿Qué tejidos están presentes?
    • ¿Qué tipo de prendas usas cuando estás allí?
    • ¿Usas complementos o accesorios?
    • ¿Qué «licencias» te permites?
  2. Ahora define el tipo de look profesional standard:
    • ¿Qué colores?
    • ¿Tejidos?
    • ¿Tipo de prendas?
    • ¿Y los complementos y accesorios?
    • ¿Licencias?
  3. ¿En qué se diferencian ambos looks?

¿Qué narices te estoy proponiendo con esto?

Que si eres clásico en casa y fuera más seductor, ya tienes mucha información sobre ti. Sobre cómo te sientes más cómodo y sobre los esfuerzos que haces para mostrar fuera quien eres. ¿A quién te quieres parecer más?

Basar tu apariencia en tu Imagen Real es lo mejor que puedes hacer para tu autoestima, para sentirte más fluido allí donde vayas y para darle la importancia que tiene a tu maestría como experto.

Luego, tu imagen personal, se puede entrenar. Te puedes «estirar», «aprender a vestir quien eres» y sorprenderte de ver cómo: es posible ser tu mismo en tu imagen pública.

2. Imagen Personal vs Imagen Profesional.

La deseabilidad social, la búsqueda de reconocimiento o incluso prestigio, posicionamiento y querer petarlo puede alejarnos de nuestra esencia si no conocemos muy bien nuestro modelo de éxito, que básicamente significa: cómo quieres vivir la vida que deseas.

Al trabajo no va el traje, vas tú metido dentro de él y cuando más respetuosa sea tu imagen externa con tus verdaderos valores, te sentirás mejor y más auténtico. Y mira tú por donde, que la autenticidad es de los factores más influyentes que existen porque invoca, la autenticidad de quien mira, entonces inspirarás. Francamente compensa.

Y es un trabajo completo y a largo plazo basado en tu desarrollo personal, no sólo habilidades estéticas.

He visto como de forma miedosa alguno de mis clientes emprendedores me ha dicho, ¿y cómo voy a incluir el valor de la Libertad en mi imagen de marca o el foco de mis servicios si me dedico a Consultoría de Procesos Informáticos?

Pues es posible, diferencial y una de las fuentes de automotivación más potentes que existen.

¿Cómo orquestarlo?

  1. No hace falta poner tus valores en grande el header de tu web, o sí, cuando seas más consciente que tus valores necesitan ése espacio para presentarte al mundo.
  2. Revisar cómo tu valor fundamental está presente en el problema que solucionas, en los procesos que aplicas, en los resultados que aportas y en los beneficios finales que se llevan tus clientes.
  3. Atreverte a mostrar quien eres sin prejuicios.

Tus valores ya estaban en ti y seguro que tu marca porque la construiste tú. El tema está en que si te lanzas a darle un primer lugar a tus principios personales, seguro que darán un giro por completo a la imagen de tu negocio y la tuya propia.

  • «¿Tengo que construir un personaje visual?»

No tienes nada que crear o diseñar para presentarte como profesional y mucho menos en los tiempos que corren en los que ya no necesitamos que un abogado vaya siempre y a toda costa en traje sastre o un artista tenga un look creativo para podérnoslo «comprar». Esto ha cambiado y ahora mismo, la diversidad es un must.

Sitúate eso sí en el entorno en el que te mueves, la dirección de tu emprendimiento, el respeto por ti y por tus clientes, el tipo de evento, lugar y hora: y la fórmula sale sola.

Forzar tu apariencia para ser atractivo, deseable y visible no siempre de transforma en más euros en tu cuenta bancaria. Ser visible para las personas que de fondo comparten contigo tu filosofía de vida es mucho más enriquecedor. Cuando llevas unos años, te das cuenta que los mejores clientes son con los que has compartido valores fundamentales y  grandes momentos. Merece pues la pena hacer el trabajo de permitirte ser auténtico y liberarte de las cadenas de la imagen ideal del emprendedor que puedas tener en la cabeza.

Destaca o impresiona por lo que eres, éso sí deja huella.

3. Como ordenar tu cambio de Imagen:

  1. Invierte en tu Auto-conocimiento para saber qué intención te mueve a hacer tu trabajo más allá del dinero, conocer cuál es tu «para qué» y el sentido de lo que te ha traído a plantearte querer ayudar a otras personas. El «por qué» que encuentres se ha construido por tu historia vital, no es aleatorio y poner conciencia en ello, llena de sentido no sólo a tu trabajo, sino a tu vida.
  2. Define luego, el impacto que quieres causar en tus clientes, un resultado basado en la transformación que vivirán al realizar servicios contigo.
  3. Mira si tu Intención e Impacto deseado están alineados y ver luego.
  4. La estrategia de comunicación y tu imagen personal.
  5. Si no funciona la estrategia planeada, vuelve al punto 1, sí, sé que supone probar, pero como te decía más arriba, no hay varitas mágicas. Es más, todo el proceso que hagas con ello te llevará en espiral a medio plazo a lugar que mereces.
  6. Mírate en perspectiva sin compararte con otros, evitando tener expectativas ideales sobre tí, copiar o aburrirte. Date cuenta que la necesidad de poner las cosas bonitas como puede ser tu imagen personal, llega en el momento en el que tienes cubiertas necesidades más básicas y previas: el Estilazo que te represente lleva tiempo.
  7. Respeta tu vulnerabilidad, ¿sabes por qué? Porque junto con tus fortalezas es el binomio de la autenticidad. Querer tapar, disimular, corregir o camuflar te impedirá expresarte como realmente eres. Sí, es un periodo un poco raro porque se siente cierta inseguridad. Apóyate de nuevo en herramientas de autoconocimiento para comprender, aceptar y perdonar, aquello que tengas pendiente contigo: ¡te liberará!
  8. Y no lo olvides, como dice Guillem Recolons: «los valores» son «superpoderes»: úsalos a tu favor y no te sientas un mutante sino un ejemplo de ti mismo.

Si estás por aquí y eres emprendedor ¿Qué estrategia quieres poner en marcha en relación a tu imagen personal?

¿Te gustaría leer más artículos como esté sobre la Imagen del emprendedor?

Deja tus comentarios más abajo.

Me encantará leerte.

Un abrazo

Domingo Delgado

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5 COMENTARIOS

Comentarios

  1. Raquel dice

    Domingo me ha inspirado mucho tu post. Ha sido muy revelador e interesante la relación entre imagen personal y emprendimiento ya que yo me encuentro en ese momento de reemprender desde una nueva evolución de mi misma y como tú dices va totalmente ligada la imagen personal que proyectas con tu crecimiento personal.
    Muchas gracias por tus artículos.

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