9 Estrategias de Auto-motivación y Colchones Psicológicos para tu Vida

Si tus días pasan como si nada, planos, con una rutina pesada que aumenta tu sensación de vacío, te sientes poco estimulado, aburrido de la vida o frustrado por no tener experiencias enriquecedoras… Te falta motivación.

Recuerdo una frase que me dijo una profe de Psicología de la Salud: «Ten siempre colchones psicológicos para vivir mejor»

Y es que muchas veces nos obsesionamos con orientarnos a objetivos, ponernos metas o buscar el sentido de la vida y la casa sin barrer…

Para provocar un cambio inmediato necesitas más ilusión, abrir las espitas de tus fuentes de automotivación y tener a mano experiencias y herramientas que amortigüen las desavenencias de tu vida.

¿Cómo y cuáles?

Hoy comparto contigo 9 estrategias para que las adaptes a ti, tu presente sea mucho más estimulante, y tu futuro una posibilidad real de vivir con más plenitud. Iré de lo más básico a lo más trascendental; creo que el orden afecta al resultado, para que puedas empezar con pequeñas acciones que se noten y funcionen:

1. Economía y créditos energéticos:

Aparentemente nada espiritual ni subjetivo.

Se habla mucho de vivir en la abundancia y de la relación con el dinero en el desarrollo personal. Y uno puede ser muy «rico» en relaciones, experiencias y regalos de la vida que son más importantes que los billetes en el bolsillo.

También rompo una lanza por ser claros con el aspectos económico: el dinero, hace falta, se puede crear y también es un factor terrenal y material que permite hacer muchas cosas.

Tanto las necesidades básicas como las más elevadas necesitan de unos pilares que sustenten tu estilo de vida (Pirámide de necesidades de Maslow). Con esto no quiero decir que hay que ser millonario para ser feliz o enfocarte a soñar con cosas caras que sean el símbolo de que tu vida va para adelante y  fluye como quieres.

Tener deudas con amigos, con el banco, con hacienda o la frutería a largo plazo drena totalmente tu autoestima y «ser seguro» se hace más difícil porque no tienes un suelo sólido sobre el que caminar.

Como te contaba en el artículo: Cancela tu crédito energético para aumentar tu calidad de vida, tanto las deudas económicas como las emocionales, son el primer paso para liberarte de una buena cantidad de miedo y sensación de vacío.

Lo primero, sanea tus cuentas o hazte un plan para cancelar tus números en rojo como prioridad número 1.

Si disfrutas de equilibrio económico, plantéate igualmente un plan de crecimiento que te permita llegar a la meta de estilo de vida que deseas.

En definitiva, no tapes «las cifras» por tratar de ser más espiritual y desapegado: ponle una cantidad a tu libertad y ve a por ello: es compatible. Cancela a la par los créditos del banco y los emocionales.

Cuando cerré mi primer local y me arruiné, traté de rascar en mis heridas emocionales para ver qué había en mí que provocó aquel desastre y aprendí muchísimo, así como de mover el culo para pagar mis garbanzos y restablecer el equilibrio de mi vida: a Dios rogando y con el mazo dando.

2.  Ten un hogar agradable:

Es más que un refugio o un almacén de tus pertenencias. La sensación de seguridad y confort son ingredientes básicos que tienes en tu casita y aumentan cuando vives en un espacio con el que te identificas 100%.

Sea grande o pequeño el sitio donde vives, si no cubre tus necesidades tendrás un agujero en tu vida por el que se escape la energía. Y voy a lo practico; ¿los espacios de tu casa se adaptan a tus necesidades?

Si te falta un sitio en que elaborar tus proyectos, más espacio en la cocina para almacenar los frutos secos o dividir el salón la parte de descanso de la social, ve a por ello y cámbialo cuanto antes.

Tu casa es la imagen refleja de tus virtudes y áreas de mejora. Cuando prestas cero atención a tu cocina podrías hacerte preguntas de qué tal te llevas con tu nutrición y si el dormitorio está oscuro y poco ventilado, cuál es la relación contigo mismo…

Si llegas a casa y cada día te haces esas preguntas automáticas sin modificar el entorno estás echando piedras a tu sensación de carga.

Haz un recorrido sensorial por toda la casa, detecta cuantas «Molestias» y «Tengo qués» hay en tu hogar y resuélvelas con diligencia: sabes que se notará y tendrás más espacio mental y emocional.

3. Aumenta la calidad de tu Sistema de Recompensa:

¿Y esto qué es?

Te pregunto: ¿qué haces cuando consigues algo? ¿sigues adelante como si nada o celebras?

Tu sistema de recompensa consiste en las estrategias que usas para disfrutar de tus logros y seguro que hay más de los que te imaginas.

No significa solamente darte premios por lo que consigues, sino de tener una forma de reconocerte tanto en la pequeñas cosas como en las grandes hazañas. Cuando llegas cansado de un duro día de trabajo ¿te planteas hacer una rica cena o te tiras al sofá sólo para que se te pase el agotamiento? Si justo esta semana te han ascendido en el trabajo, ¿qué tal una escapada con tu pareja en el próximo puente? ¿O sigues como si nada hubiera ocurrido..?

Por un lado, crea tu sistema de recompensa a medida, compártelo con otras personas y por otro lado:

Sé consciente de que nuestro sistema neurológico de recompensa se aturulla con la tecnología por el exceso de estímulos cerebrales: televisión, radio, portátil, móvil en la mano actualizando instagram a las doce de la noche…

El estrés aumenta cuanto más tiempo y más aparatos electrónicos manejes en tus horas de vida, nos separan de la comunicación de calidad con quienes compartimos casa y genera de forma exponencial: más cosas por hacer, ver y actualizar: piénsalo; que no viva por ti el mundo digital y se convierta en la única vía de obtener un chute de dopamina.

4. El cuerpo fuerte proyecta una mente clara:

Te cuento el proceso Mente-Emoción- Físico:

Cuando tienes barullo mental por exceso de preocupaciones, decisiones sin tomar que te agobian o carga de trabajo, se da un cambio natural en las emociones. Comienzas a sentir presión, enfado, tristeza, etc… que si se alargan en el tiempo estás situaciones pueden convertirse en cargas emocionales más potentes.

¿Y qué más pasa? Que si no las canalizamos es el cuerpo el que tendrá que aportar energía extra para compensar tu estado: aparecen los dolores de cabeza, la pesadez en las piernas, el frío en manos y pies, ardor de estómago…

Si en este proceso el cuerpo está débil por sedentarismo, fumar demasiado, alimentación caprichosa o falta de oxigenación se hará más difícil revertir tu estado. Muchas veces pensamos que como no tienen importancia las pequeñas afecciones, ya pasarán…

Si aprendes a escuchar tu cuerpo y además lo tienes apunto: será más fácil detectar las emociones que vienen a verte para contarte cosas sobre ti y entonces tu pensamiento será más afinado y útil.

Así que piensa que la voluntad, productividad y descanso: son oxígeno.

Para pensar con mayor nitidez, tomar decisiones de forma fluida o afrontar los cambios son soltura requieren de un físico a tono. No es necesario tener un entrenador personal pero toma acción y sal al menos a dar una vuelta en el momento que veas que el círculo vicioso comienza a formarse.

Sólo por ser consciente de tus propias dinámicas ya tienes más recursos que antes y saber ponerle remedio te permitirá sentirte más motivado, y relajado…

5. Ten tu Tribu:

¡Necesitamos personas a nuestro alrededor!

Pero no todas.

¿Quienes son aquellos que te inspiran y ven lo mejor de ti?

Hay varias áreas por cubrir que pueden resultarte estimulante:

• Personas que vean lo mejor de ti, te empujen a conseguir tus metas y llenen tu vida de experiencias positivas.
• Personas honestas y sinceras que sean capaces de aportarte una crítica constructiva desde el amor y de forma desinteresada.
• Mentores: no necesariamente de temas laborables aunque también. Son personas expertas en áreas, cualidades o fortalezas que tú quieres desarrollar.
• Personas a las que admires y puedas modelar, no copiar.
• Maestros de vida: esas personas que te incomodan y de las que saldrías corriendo al verlas por la calle pero resulta que te devuelven espejo de asuntos sin resolver: no las excluyas. Lo que sientes es tuyo y si ambos traspasáis las barreras del ego podréis construir una relación muy reveladora. Si está en tu vida, por algo será 😉
• Personas a las que te guste «dar» de forma desinteresada y que te inspiren amor y ternura.
• Personas con las que te sientas cómodo, puedas frivolizar de los dramas, estar en pijama o simplemente salir de tiendas sin comprar nada. No todo es profundo, lo superficial es también humano.

Sentirte identificado con otras personas aumentará tu sentido de pertenencia, aporta seguridad, ayuda a relativizar problemas en común y a sentirte acompañado en el camino de la vida.

6. Encuentra tu Vocación:

¿Cuántas personas conoces que van a trabajar en automático sólo para obtener dinero?

Los «trabajos alimenticios» son útiles emocionalmente para satisfacer las necesidades más básicas. Si ya no estás ahí, busca un trabajo aspiracional.

Para ello necesitarás conocerte todo lo bien que puedas. Déjate sorprender por tu instinto: ¿Si no tuvieras que pagar sólo facturas, a qué te dedicarías?

Es muy poco saludable dedicarte a algo que no te gusta, hacer lo contrario implica tomar riesgos y estrujarte la cabeza para conseguir hacer lo que has venido a hacer al mundo.

Hoy en día, incluso, tienes la posibilidad de fabricarte tu propio trabajo.

Son muchas horas al día, ten en cuenta que si te orientas a tu verdadera vocación, tendrás más de 8 horas diarias de motivación de alta calidad.

¿Dónde está tu Propósito?

En la intersección de:

– Lo que amas.

– Lo que sabes hacer.

– Lo que el mundo necesita.

– Por lo que te van a pagar.

Completa esta lista y ¡sorpréndete!

7. Estética: rodearte de cosas bellas

Hay una fina línea entre querer acumular objetos fascinantes, tener un look o una decoración 10 y desarrollar el sentido de tu estética.

La armonía hace sentir bienestar y paz y además nutre tu dimensión espiritual.

Si miras a tu alrededor:

¿Qué cuenta tu forma de vestir, el barrio donde vives, los regalos que haces, la decoración de tu casa o la música que escuchas?

¿Cuál es el mensaje?

El sentimiento estético real forma parte de las necesidades más elevadas del ser humano y corresponde a la Autorrealización.

Creo profundamente que todos llevamos un Creador dentro que necesita expresar quien es a su alrededor. Piensa que también puedes conocer a través de la «forma», pero no por ser amanerado, ostentosos, vanidoso o snob.

Cuidar los detalles inspira a cualquiera y convertirlo en un modo de vida te conectará con la Excelencia.

¿Cómo destapar los dones de la belleza? Por orden:

– Limpieza e impecabilidad es tus palabras, gestos y espacios que habitas.

– Poner orden en tu vida, casa, trabajo, sentimientos, relaciones, proyectos y aspiraciones.

– Buscar la esencia de las cosas.

8. Tú «para qué»:

Una de la fuentes de auto-motivación más potentes son tus valores, la razón última por las que haces las cosas. Y en definitiva, ser consciente del sentido de lo que haces en tu vida, trabajo y relaciones.

Un ejercicio útil es preguntarte nada más abrir los ojos por la mañana: ¿para qué me levanto?

Quizá te lleve unas semanas o tal vez años…

Si lo pones en práctica verás que la propia tarea motiva en sí misma y si un día emerge de ti: para ser Libre, o para Amar, o para Contribuir, será una gran noticia.

9. Ponte objetivos:

Y bajando a la tierra…

La única manera de hacer realidad lo que eres, sabes, sientes y sueñas es proponiéndote metas.

¿Qué tal te sientes cuando has conseguido lo planeado?

Pues piensa que describir, ponerte objetivos y hacer planes, en sí mismo también es motivador. Sólo necesitas papel y boli.

Es toda una ciencia pero te ayudará plantearte Metas que sean:

– Medibles

– Específicas

– Tangibles

– Y alcanzables.

Pasar de la declaración de intenciones a provocar cambios en tu vida vendrá de convertirte en todo un entrenador de ti mismo que sepa diseñar, cuando, cómo y dónde dar los pasos que necesitas para crecer.

Espero que te hayan servido estas estrategias y apliques al menos una los próximos días.

¿Qué más herramientas usar en tu vida para Automotivarte o tener descanso interior?

Me encantará leer tus comentarios.

Un abrazo

Domingo Delgado